Lucas Montecel, de 53 años, estuvo entre los fieles de la parroquia de Holy Cross la noche del día 22 de la reunión de alabanza y adoración “Jesús en Zion” en el Bronx. Estaba allí, acompañado de su esposa Aida, para rezar por su madre enferma que, recién hospitalizada, se encontraba en un centro de rehabilitación.  

“Tiene cáncer, está muy enferma. Estoy aquí por ella y por otras razones”, dijo Montecel, padre de tres hijos, a The Good Newsroom el miércoles 15 de marzo mientras estaba sentado con Aida en medio de los bancos traseros.      

“Esta es mi tercera vez aquí. Estuve aquí dos veces en los últimos días de febrero… No sabía que sería tan hermoso este avivamiento. Encontré paz. Es muy espiritual, muy fuerte. Varias personas comenzaron a hablar en lenguas. Ha reforzado mi fe. Ha sido una bendición. Dijeron que van a mantenerlo en marcha todo el tiempo que puedan. Esto es lo que necesita la gente; esto es lo que la comunidad necesita. Con todas las cosas que suceden en el mundo, la gente está buscando a Dios”.

Montecel es feligrés de Holy Cross; habló con The Good Newsroom poco después de que varias mujeres, cerca del área del altar ante el Santísimo Sacramento, guiarán a la gente a rezar el Rosario en español. 

Más tarde en la noche, el homilista de la misa, el Diácono de Holy Cross James “Jaime” Bello, habló de la relevancia de la historia de La Bella y la Bestia; el mensaje fue: todos tenemos una bestia dentro de nosotros, debemos cambiar esa bestia interior en hermosura espiritual, con la Luz de Cristo, confiando en Dios, guiados por el Espíritu Santo.

“¿Podría ser que las semillas de la belleza yace dentro de la bestia?” El diácono Bello dijo a los más de 300 hombres, mujeres y niños en las bancas. “¿Será que nos está llamando a todos y cada uno de nosotros a convertirnos, a cambiar nuestros caminos pecaminosos, a veces nuestros caminos bestiales?”

Dijo que en la Biblia, Cristo “se convierte en la bestia para que la bestia se convierte en la belleza. Jesús cambia de lugar con nosotros. Así es como Dios nos ama… Jesús murió para que podamos vivir… La Belleza vino, y la Belleza se preocupó. A veces sale la bestia en nosotros y no vemos la belleza que yace dentro de nosotros, y la belleza que yace ante nosotros… Sigamos dirigiéndonos a Dios como una sola familia”.

El celebrante principal de la misa fue el padre Vincent Druding, vicario parroquial de Holy Cross, quien apasionadamente dirigió a todos en alabanza y adoración antes de la liturgia, con acompañamiento musical de músicos del Ministerio Agnus Dei, con sede en Manhattan y Brooklyn. 

“Estamos aquí esta noche como una familia, unidos como familia”, dijo el padre Druding durante la alabanza y adoración, hablando y orando en inglés y español. “Jesús siente el dolor, el dolor de las personas que se sienten separadas de sus familias, sus seres queridos.  Y voy a usar, de alguna manera, este momento de estar unidos como una familia en Él, para sanar algunos corazones aquí esta noche. Dios va a hacer algo por ti esta noche… Jesús, llévanos al cielo. Hay corazones que necesitan ser sanados. Alabemos al Señor… Te alabamos, Señor. Vinimos aquí para alabar a Jesucristo. Gracias, Señor. Gracias, Jesús. El Señor puede sanar a través de Su nombre”. 

Antes de que comenzara la misa, Ana Infante, de 61 años, compartió con The Good Newsroom  que ella estaba allí para orar por el bienestar de su familia. “Este es un evento maravilloso; es increíble y no se ha parado”, dijo la madre soltera de tres hijos mientras esperaba la misa en los bancos delanteros. “Está lleno del Espíritu Santo; todos los que vienen aquí sienten la presencia. Debemos estar agradecidos con Dios todos los días”. La Sra. Infante es feligresa de Nuestra Señora de Lourdes en Manhattan.

“Muchas personas han recibido el regalo de lenguas durante este avivamiento”, y señaló que a veces ora en lenguas. “La gente puede orar, alabar o cantar en lenguas”, el padre Druding dijo más tarde a The Good Newsroom.  

El evento de alabanza y adoración, Adoración Perpetuo está siendo realizado en inglés y español y ha presentado música en vivo. Ha incluido Adoración del Santísimo Sacramento, rezo del Rosario, confesiones, compañerismo, las Estaciones de la Cruz, celebraciones de misa, servicios de sanación y mucha música. Cientos de personas asisten cada noche.

La reunión se transmite en vivo a través del canal de YouTube de la parroquia de Holy Cross: 

Catholic Soundview. La iglesia Holy Cross está ubicada en 600 Soundview Ave., el Bronx.