CIUDAD DEL VATICANO (CNS) — Al saludar a las decenas de miles de visitantes que abarrotaban la plaza de San Pedro, el Papa León XIV dio la bienvenida a todos los jóvenes que llegaron a Roma para el Jubileo de la Juventud.

“Saludo con especial afecto a los jóvenes provenientes de diferentes países, reunidos en Roma para el “Jubileo de los Jóvenes”, que comienza mañana, dijo tras recitar el Ángelus el 27 de julio.

El pontífice estadounidense pronunció el mismo saludo en italiano, inglés y español, lo que provocó grandes vítores por parte de los jóvenes de cada grupo lingüístico.

“Espero que sea para cada uno ocasión para encontrar a Cristo y ser fortalecidos por Él en la fe y en el compromiso de seguirlo con coherencia”, les dijo en los diferentes idiomas.

El Jubileo de los Jóvenes se celebra del 28 de julio al 3 de agosto. Si bien se esperaba que medio millón de personas estuvieran en Roma para el inicio de la celebración de una semana de duración, se esperaba que un millón de personas asistieran a la vigilia de oración y a la Misa de clausura al aire libre en el barrio romano de Tor Vergata.

El Papa León también saludó a los periodistas de Radio Vaticana, Vatican News y el periódico vaticano L’Osservatore Romano, que trabajaban en una pequeña estación de noticias recién inaugurada bajo la columnata de la plaza “para estar más cerca a los fieles y peregrinos durante el Jubileo”.

Agradeció a los medios de comunicación del Vaticano por su servicio en más de 55 idiomas para llevar “la voz del Papa al mundo”.

“Y gracias a todos los periodistas que contribuyen a la comunicación de paz y de verdad”, dijo entre aplausos.

El Papa también recordó a los católicos que ese día se celebraba la quinta Jornada Mundial de los Abuelos y los Mayores, dedicada al tema “Feliz el que no ve desvanecerse su esperanza”.

“No los dejemos solos, sino que unámonos a ellos en una alianza de amor y oración”, dijo. “Veamos a los abuelos y a los mayores como testigos de esperanza, capaces de iluminar el camino de las nuevas generaciones”.

Antes del Ángelus, el papa reflexionó sobre el Padrenuestro, que nos recuerda que “el Señor nos escucha siempre cuando rezamos”.

“Y si a veces nos responde con tiempos y modos difíciles de comprender, es porque obra con una sabiduría y una providencia mayores, que van más allá de nuestra comprensión”, dijo el Santo Padre. “Por eso, aun en esos momentos, no dejemos de rezar con confianza, en Él encontraremos siempre luz y fortaleza”. Instó a los fieles a sentirse amados, mediante la oración y la caridad, y a amar como Dios nos ama: con apertura, discreción, interés mutuo y sin engaños.