El padre José Félix Ortega, decano de la región Oeste del Bronx de la Arquidiócesis de Nueva York, dirigió el domingo la celebración de la Misa de la Hispanidad en la Catedral de San Patricio.

“Esta catedral, tan hermosa, está construida con muchas piedras, pero nosotros somos la piedra viva”, dijo el padre Ortega al comienzo de la homilía, señalando que son las personas quienes conforman la Iglesia fundada por Cristo. La Misa en español se celebró la tarde del domingo 5 de octubre.

Unas 1000 personas asistieron a la Misa anual. El padre Ortega es pastor de las iglesias Nuestra Señora del Monte Carmelo y San Martín de Tours, ambas en el Bronx.

Un hogar lejos del hogar                    

El sacerdote habló de la importancia de la historia de la catedral, diciendo: “No es solo un lugar de piedra, sino un lugar de unidad en la diversidad. Como nosotros, somos diversos en culturas, idiomas y dialectos, pero podemos, debemos y queremos vivir unidos. Para nosotros, los inmigrantes, la Iglesia siempre ha sido un hogar lejos de casa”. Señaló que en la  Arquidiócesis de Nueva York y más allá, la Iglesia ha buscado ayudar a los inmigrantes a practicar su fe según la celebran en sus países de origen.

“La fe ha sido la fuerza que nos ha sostenido y nos sigue sosteniendo en medio de las luchas, los sacrificios y las dificultades”, dijo el padre Ortega. “Porque venir a la casa de Dios es sentirse como una familia, miembros de la familia de Dios… San Pablo nos dijo que somos ‘conciudadanos de los santos’. Qué palabras tan poderosas para nosotros, los latinos, en esta gran ciudad. Y recordamos el sacrificio y la fe de muchas generaciones de inmigrantes”.

El sacerdote, nacido en España, destacó la importancia del mural recién instalado en los muros interiores de la entrada principal de la catedral, y señaló que en él se representan las contribuciones de fe y cultura de los inmigrantes del pasado y del presente en Nueva York. Aludiendo a la firme fe de los santos y siervos de Dios que aparecen en el mural, el padre Ortega dijo a los fieles que, ante el rechazo como inmigrantes, “nuestra respuesta debe ser amor, porque el amor siempre vence”. 

Arlett Rojas, miembro de la junta directiva del Desfile de la Hispanidad de la ciudad de Nueva York, pronunció las palabras de clausura: “Ante todo, doy gracias a Dios, y a la Arquidiócesis de Nueva York”. Rojas también agradeció al padre Ortega por celebrar la Misa, a todos los que ayudaron a organizarla, y a los asistentes. “Este es el preámbulo de nuestro desfile”, dijo.

Palabras desde los bancos 

Entre los asistentes a la Misa se encontraban Manuel y Aida Basantes, feligreses de la Iglesia de Santa Juana de Arco en el área de Jackson Heights, en Queens. Los padres de cuatro hijos y abuelos de siete dijeron que habían asistido a la Misa de la Hispanidad en la catedral en años anteriores y que estaban contentos de haber asistido también a la liturgia de este año.

“Siempre ha sido importante para nosotros asistir a Misa en nuestra parroquia, pero también fue importante para nosotros estar aquí en la catedral para esta Misa especial”, dijo Manuel Basantes a Buenas Noticias después de la liturgia, destacando la fe y la importancia cultural de la reunión. La Sra. Basantes señaló que también planean asistir al Desfile de la Hispanidad de este año, como lo han hecho en ocasiones anteriores. El Sr. y la Sra. Basantes nacieron en Ecuador.

La Misa se celebró para conmemorar el Mes de la Herencia Hispana (del 15 de septiembre al 15 de octubre). Fue organizada por el Apostolado de Diversidad Cultural de la Arquidiócesis, en colaboración con la junta directiva del Desfile de la Hispanidad.

Este próximo domingo 12 de octubre, el Desfile de la Hispanidad de la ciudad de Nueva York comenzará al mediodía en la Quinta Avenida, desde la calle 44 hasta la calle 77. Cada año participantes alegres con ascendencia de 21 países latinoamericanos se unen para mostrar su música y su cultura. Para obtener más información, visite www.desfilehispanidadny.org.