'Reafirmó mi sacerdocio': Obispo nicaragüense que vive exiliado en Florida inspira a sacerdotes hispanos de Nueva Jersey
By: Our Sunday Visitor
A fines de mayo, sacerdotes hispanos de la Arquidiócesis de Newark y de la Diócesis de Paterson dieron la bienvenida al obispo Silvio José Báez, obispo auxiliar de Managua, Nicaragua
NEWARK, Nueva Jersey (OSV News) — El mensaje que un obispo nicaragüense que vive en el exilio le dio a sacerdotes de habla hispana en el primer retiro de este tipo en Nueva Jersey fue “personalmente muy inspirador” y “reafirmó mi sacerdocio”, dijo el padre Bismarck Chau, párroco de la Catedral Basílica del Sagrado Corazón en Newark.
A fines de mayo, sacerdotes hispanos de la Arquidiócesis de Newark y de la Diócesis de Paterson dieron la bienvenida al obispo Silvio José Báez, obispo auxiliar de Managua, Nicaragua, a este primer retiro para sacerdotes de habla hispana.
El obispo Báez, brindó aliento al ministerio de los sacerdotes en tiempos de adversidad, según el padre Benny Prado, párroco de la Iglesia de la Inmaculada Concepción en Montclair, Nueva Jersey, y el padre Chau, quienes coordinaron conjuntamente el retiro para los sacerdotes.
Los dos párrocos nicaragüenses invitaron al obispo Báez a hablar en el retiro que se llevó a cabo en la Iglesia de la Inmaculada Concepción con la aprobación del cardenal Joseph W. Tobin, C.Ss.R., arzobispo de Newark, quien asistió al último día.
El obispo Báez ha estado exiliado durante cuatro años a pedido del Papa Francisco, quien en el año 2019 le pidió al obispo que abandonara Nicaragua para protegerlo de las amenazas de muerte por parte del régimen del presidente Daniel Ortega. Los ciudadanos nicaragüenses comenzaron a protestar contra Ortega en el año 2014 debido a la corrupción política y las tensiones se intensificaron durante la siguiente década.
En el tiempo previo a su exilio, el obispo Báez y otros líderes católicos actuaron como intermediarios entre Ortega y los manifestantes antigubernamentales. Pero en abril del 2018, la represión de Ortega a las protestas se volvió mortal. A medida que la violencia y los asesinatos aumentaban, el obispo Báez se volvió cada vez más vocal en su crítica al gobierno represivo y Ortega lo acusó de planear un golpe de estado en octubre del 2018.
Después de salir de Nicaragua, el obispo Báez permaneció temporalmente en Roma antes de mudarse a Miami, Florida, donde reside actualmente y enseña en el Seminario San Vicente de Paul en Boynton Beach. Ha hablado abiertamente sobre su exilio, diciendo en el 2019 que la decisión del Santo Padre, que aceptó y asumió, “ha hecho llorar a mi corazón”.
El obispo también ha denunciado al gobierno de Ortega en numerosas ocasiones, calificándolo de régimen cruel. Pero el obispo Báez, que tiene un doctorado en Teología Bíblica, se basa en la fe como fuente de resiliencia y señala la forma última de sufrimiento y resurrección. “Así como Jesucristo, crucificado por los poderes del mundo, fue resucitado por Dios a una vida que no tiene fin, los pueblos crucificados, tarde o temprano, también resucitan”, dijo en 2022.
La experiencia del obispo Báez puede ser un caso extremo, pero les dijo a los sacerdotes en el retiro que puede entender las luchas que muchos de ellos enfrentan mientras lideran a sus congregaciones en un mundo que puede ser hostil hacia la religión.
Durante la conversación, el obispo animó y celebró su ministerio haciendo referencia al profeta Ezequiel. Destacó cómo el Señor llamó a Ezequiel a hablar a su pueblo mientras estaba en el exilio, lo cual el padre Prado consideró un enfoque relevante y oportuno en el clima actual.
“A veces, como sacerdote hoy en día, es fácil desanimarse, la moral baja e incluso cuestionamos nuestra vocación”, el padre Prado le dijo a Jersey Catholic, el medio de noticias en línea de la Arquidiócesis de Newark. “Vivimos en tiempos de persecución con una perspectiva poco saludable sobre nuestro ministerio. El obispo Báez habló sobre la vocación del profeta Ezequiel… y cómo este hombre pudo ministrar a su pueblo en una época de desaliento”.
“Fue muy reconfortante el mensaje que nos transmitió basado en Ezequiel y su experiencia como profeta. A veces solo nos consideramos sacerdotes, pero no solo somos sacerdotes, también somos profetas. Eso fue muy poderoso para mí”, dijo el padre Chau, quien se sintió muy inspirado al escuchar al obispo Báez.
Ambos sacerdotes resaltaron la importancia del retiro para su enriquecimiento espiritual y fraternidad, que reunió y unificó a sacerdotes hispanos de la Arquidiócesis de Newark y más allá. El padre Prado y el padre Chau tienen la esperanza de que aún más sacerdotes se unirán al retiro del próximo año, que está planeado tentativamente durante cinco días en la Casa de Retiros San Alfonso en Long Branch. También esperan invitar nuevamente al obispo Báez como orador.
En un tuit del 25 de mayo, el obispo Báez agradeció al cardenal Tobin y a los sacerdotes por la invitación: “Agradezco al Cardenal Joseph Tobin, Arzobispo de Newark, y a los sacerdotes hispanos de esta arquidiócesis por haberme invitado a predicarles el retiro anual esta semana. Dios bendiga su ministerio. Gracias por su acogida fraterna”.